Evitaron que se sepa

Chocaron un auto municipal en la Secretaría de Obras

Incrustado en la columna (foto: La revista digital).
Incrustado en la columna (foto: La revista digital).
Así quedó el vehículo.
Así quedó el vehículo.

El medio colega La revista digital publicó un hecho ocurrido en la Secretaría de Obras con uno de los vehículos utilizados por el área de Seguridad.

A continuación, la reproducción de la publicación:

Cuando la noticia nos llegó, sencillamente no pudimos creerlo: Alguien (sería un inspector, hoy trabajando en otra área). Nos informaron fuentes inobjetables que «Un inspector chocó muy fuerte dentro de la secretaría de Obras y Servicios el Renault Logan que en la anterior gestión era manejado habitualmente por el ex Secretario de Seguridad».

Lo chequeamos con tres fuentes distintas y nos confirmaron el hecho. No obstante, solicitamos que nos manden una foto, para que no queden dudas, y así fue que luego de unos días, la foto llegó, de alguien que la tomó seguramente en el momento del hecho, pero la había mantenido sin difundirla.

Ahora bien, el hecho entonces, no solo ocurrió, sino que se encuentra documentado con una fotografía. Pero lo más grave de esta situación, es que las autoridades lo mantuvieron totalmente escondido. Luego, nos enteramos que la persona que ocasionó el siniestro, no recibió ningún tipo de sanción, sino que fue «trasladado» a otra dependencia.

LAMENTABLE RETROCESO DE UNA SECRETARÍA QUE FUNCIONABA BIEN

Este hecho, como tantas otras situaciones que se vienen sucediendo en el área de la Secretaría de Seguridad, marcan una enorme diferencia con la gestión anterior, que fuera comandada por Santiago Muscarello, a quien cuando fue necesario, también criticamos, pero la diferencia a su favor con la actual gestión es abismal.

En aquel entonces, tuvimos la oportunidad de visitar la secretaría y realmente nos sorprendió el buen ambiente de trabajo, la pulcritud, la buena onda de los empleados y la concentración en su ocupación. Todas las cámaras funcionaban, se hacían operativos que por primera vez se comenzaron a ver resultados en la ciudad, y los inspectores trabajaban con gusto. Muscarello por otra parte, ingresaba a la oficina muy temprano a la mañana, y se retiraba a la medianoche, cosa que nos narraron los propios empleados, que hoy comentan algo muy distinto.

También recordamos una situación en la que suspendió por 3 días a una persona a su cargo, por el hecho de subirse al techo de una camioneta, y aunque no le había ocasionado ni un rasguño.

Hoy, sucede todo lo contrario. No solo con el hecho narrado, sino que hay muchas cámaras que no funcionan (la anterior gestión las entregó todas funcionando); El secretario, según nos cuentan algunos empleados, muchas veces «va solo un ratito» durante la jornada, las cámaras, o no funcionan, o en algunos casos han quedado «tapadas» por algunas ramas, otras se han cambiado de lugares y otras «apuntan hacia el piso», como lo denunciamos hace un tiempo en otra nota de esta página.

Luego, ante estos hechos, no se toman medidas ejemplificadoras, sino que todo lo contrario. Se esconden situaciones y en varios casos, se maltrataría al personal, delegando funciones del secretario en algunos que no solo desconocen el trabajo que deberían hacer en sus propias secretarías, sino que además los ponen a «arengar» inspectores para recaudar más con el estacionamiento medido, lo que es un despropósito…

Algunas preguntas:

¿Qué hacía el inspector en la camioneta, para provocar un golpe de tal magnitud?

¿Se informó debidamente el hecho, contando la verdad de lo ocurrido?

¿Se amenazó a empleados testigos para que no cuenten nada?

¡Se puso en conocimiento de los distintos sectores y bloques del concejo, ya que se trata del patrimonio municipal?

Las máximas autoridades de Chascomús, intendente y Secretario de Gobierno, ¿están al tanto de este hecho y su resolución?

En definitiva, unas cuantas cuestiones que deben ser explicadas, ya que aunque parezcan no recordarlo, los funcionarios son nuestros empleados, y no solo deben ser eficaces, sino que además nos deben un mínimo de respeto.

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