Keila tiene 7 años, es paciente oncológica con metástasis y tiene un sueño: conocer a Emilia Mernes y Duki.
Según pudo saber BerissoCiudad de por testimonios de allegados, la niña tiene un diagnóstico, de acuerdo a lo informado por los médicos, de tres meses de vida -aunque confían en que puedan ser muchos más-.
La nena proviene de una familia humilde, fue criada por su abuela y en sus siete años afrontó distintas cirugías que incluyeron extirpaciones de los tumores.
“Ella es valiente y siempre tiene una sonrisa hermosa”, afirman sus familiares, que desean que la difusión de su caso llegue a conocerse y poder lograr que Keila cumpla su sueño.