"Duermo poco" dijo Guillermo en FM Por Siempre y esa fue la explicación de por qué estaba despierto a las 3 de la madrugada, tomando mate en la cocina de su casa ubicada en Presidente Perón y Córdoba.

El caso es que la falta de sueño le permitió escuchar la rotura de un vidrio y que varias personas caminaban por su techo. Por suerte, la presencia de dos perros guardianes en el patio, habrían impedido que los malvivientes ingresaran a la propiedad.

De todas maneras, el entrevistado aseguró que tiene armas y el permiso correspondiente para utilizarlas si la circunstancia lo ameritaba.

Por último, se lamentó que la policía tardó 15 minutos en llegar a su hogar y que tuvo que prestarles sendas linternas a los efectivos, dado que carecían de ellas para iluminar la zona y buscar a los inesperados visitantes.

Ahora, está abocado a la tarea de reconocer a los malhechores con la ayuda de las imágenes de las cámaras de seguridad privadas que existen en inmediaciones de su domicilio.