SALTO, Agosto 05 (SaltoCiudad.com) A los 14 años tuvo su primera experiencia de participación política. Eran los años de la vuelta a la Democracia cuando formó parte del Centro de Estudiantes en la Escuela San Martín. Al finalizar la secundaria no dudó y comenzó a estudiar magisterio. Sus primeros pasos en la educación los dio en la escuela rural de Tacuarí. Con 20 años en la docencia, Cristina Patriarca, precandidata a consejera escolar por Compromiso Federal, tiene dos sueños: estudiar Trabajo Social e integrar el Consejo Escolar. 

¿Cómo llegó a la educación?

Primero estudié para docente, después, en la Escuela Agrícola, me recibí de Técnica Auxiliar en Economía Doméstica y Rural, y por último estudié Maestra de Adultos. Me encanta la docencia, me apasiona, soy una privilegiada, ya que trabajo de lo que me gusta. Me encanta la Educación Especial y también la Rural; dando clases en esos ámbitos soy feliz.

¿Y a la política?

En la Escuela San Martín inicié el camino de la participación. Empecé la secundario en pleno proceso militar, con la cultura del “No te metás”. Tuve la oportunidad de integrar el Centro de Estudiantes, de estar en las comisiones; cada vez que se hacía algo en la escuela, yo participaba. En las elecciones, en la campaña. Fue muy rica esa experiencia para mí. Luego, ya trabajando, estuve bastante involucrada en la actividad gremial en SUTEBA y aprendí mucho desde ese lugar. Conocí los derechos y obligaciones que tenemos como docentes y principalmente me capacité. Luego, en 2007, fui candidata a Consejera Escolar suplente. En esta oportunidad, fue difícil la decisión de ser la primera candidata, me parecía que era un puesto demasiado grande. Marcelo fue el que me convenció para que me atreviera a dar este paso. Uno no puede quedarse en el lamento, no sirve de nada; uno en la vida tiene que proponer cosas, cambios, trabajar para generar esos cambios.

¿Qué le gustaría gestionar desde el Consejo Escolar?

A Salto le hace falta algo muy básico: dos escuelas secundarias Y, además, considero que es importante también el mantenimiento de las escuelas. Educación no solamente son los sueldos de los docentes, incluye los edificios escolares, el bienestar de los chicos. En nuestros distritos los establecimientos educativos están bien equipados, con calefacción en todas las aulas, los docentes están muy comprometidos con sus instituciones. Pero creo que Dirección General de Escuelas debería aportar mucho más a las escuelas de Salto. Tuvimos que esperar demasiados años para que construyan una escuela secundaria, y mientras tanto se va emparchando.

Otro tema por el que lucharía es el del presupuesto del servicio alimentario. En cuanto a la rama donde me desarrollo, la Especial, la gente de Consejo Escolar tiene muy buena predisposición. Lo que se necesita en educación especial, es el Centro de Comunicación Integral, lo que sería la Escuela Secundaria de Especial. Hoy se le llama Propuesta para Adolescentes. Jóvenes y Adultos para Educación Especial. Para esto necesitaríamos un edificio nuevo o la división del actual. Durante muchos años fue una modalidad abandonada, pero a partir de la nueva ley, mejoraron los recursos.

¿Cuáles son lineamientos educativos que implementaron los hermanos Rodríguez Saá en la provincia de San Luis?

Lo que plantearon en San Luis en cuanto a educación apunta a la tecnificación, la tecnología y el medioambiente. Han sido uno de los precursores en implementar políticas educativas que involucran a los chicos en el cuidado del medioambiente. En este sentido, trabajan diariamente con programas de forestación masiva. En cuanto a infraestructura, los edificios están bien mantenidos, con ambientes saludables. Con respecto a los comedores escolares, son partidarios de que los chicos coman con sus padres y para ello  aplicaron políticas para que el niño concurra a la escuela y luego almuerce con su familia, porque consideran que esta es la institución más importante. Trabajan en la integración familia-comunidad escolar.

Patriarca por 10

Lugar favorito de Salto: el balneario.

Una maestra: Mary Carusso, mi maestra de séptimo grado.