Un grupo de mujeres que vive en Garay al 200 con sus hijos, 22 en total y con tres de ellos discapacitados, exigen al municipio una vivienda en buen estado. Para exteriorizar su reclamo, cortaron la calle.
El lugar donde actualmente viven fue otorgado por el municipio, pero tiene serios problemas para habitar, ya que los cables de luz “son un peligro” y los techos corren riesgo de caerse, además de no contar con agua.
Sumado a esto, señalaron que la actual gestión las quiere desalojar, ya que al no pagar el alquiler se debe devolver la vivienda.
Las mujeres están aguardando que se presenten autoridades municipales con una solución, sino amenazan con seguir durante la noche con el corte de la arteria.