La familia Armas fue víctima de un robo en su casa de Ranchos. Sufrieron tortura por parte de los delincuentes.
La pareja sufrió quemaduras en sus extremidades, en un insistente pedido de dinero que la familia decía no poseer.
Además, como se observa en las imágenes, la vivienda fue destrozada, y antes de su huida, se llevaron las memorias de las cámaras de seguridad.
Aún no hay detalles de la Policía
Fuente: Multimedio Digital